El cv es nuestra carta de presentación. El armado del mismo requiere suma atención y dedicación. De esto depende una oportunidad laboral o mejor dicho, muchas veces nuestro futuro se juega en esta presentación que lo hacemos casi automáticamente, sin prestar demasiada atención.
Para la mayoría de las actividades poseen particularidades pero hay cuestiones comunes para todas. Por ejemplo, el título universitario es muy importante pero también lo son los cursos con certificación, los títulos intermedios, la experiencia, etc. Es muy importante focalizar esto y destacar debidamente nuestras fortalezas.
Ante una búsqueda laboral se recomiendan algunos ítems para tener en cuenta:
- Conozcan y analicen la empresa que realiza la búsqueda. Es imprescindible saber a que empresa vamos a presentarnos.
- Es interesante que el cv sea dinámico, es decir que se destaque los conocimientos y datos que hacen referencia a la búsqueda en particular.
- No tener un cv para todas las búsquedas.
- El formato es parte del cv, tiene que ser práctico, vistoso, sin caer en la ridiculés o lo sobrecargado.
- Explicitar concretamente la experiencia laboral, si la tiene, y la actividad que realizó. Sin explayarse demasiado.
- La categoría “observación” es para referenciar y reforzar nuestra personalidad. Son datos que aportan y sostienen nuestra sociabilidad, nuestro espíritu de grupo, signos de liderazgo, etc. No es para poner un “hobby”.
- Si se coloca una foto, se sobreentiende que es sin accesorios (lentes, auriculares, etc) y no es de cuerpo entero ni en diversos escenarios. La ropa es indistinta.
Obviamente se podría agregar más sugerencias pero estas son las mínimas necesarias. Un buen cv hace la posibilidad de una entrevista, y en un mundo de alta complejidad y competencia como el actual no es poco. Es más creo que es un buen comienzo.